El bus hacia Pillcopata (para por la entrada de Wayqecha) sale lunes, miércoles y viernes a las 5:30am. Nos dijeron: “Vayan a Gallito. Ahí compran los pasajes y listo”. Llegamos al bendito “Gallito”… y estaba cerrado. Era una puerta verde con rejas. Cerrada. Nadie nos daba razón. “Es que es la fiesta de Paucartambo, nadie trabaja.” Preguntamos: “¿Y abren mañana?” “Seguro señorita, no sé” – nos contestaron. Si no salíamos con el bus del miércoles, teníamos que esperarnos hasta el viernes, y todo ya estaba planeado para entrar el miércoles. Además, quedarnos en Cusco 2 días más salía de nuestro presupuesto.
Por suerte, había otra agencia que salía hacia Paucartambo; en la oficina nos dieron el dato. Entonces el miércoles 20 de julio, estábamos en la agencia “Unancha” esperando para subir al bus, con todos nuestros bultos. Ese día D. y yo nos levantamos a las 430am, arreglamos todas nuestras cosas y nos tomamos un taxi hacia “Unancha”. El bus era del tipo de buses que paran cuando ven pasajeros en la carretera, sin importar que haya asiento o no. En fin. Nosotras habíamos comprado nuestro pasaje con anticipación e íbamos cómodamente sentadas. Bueno, cómodamente es relativo.
| Estación de "Unancha" |
| Espera en Paucartambo. Nuestro bus estacionado. |
Después de hora y media de viaje, por fin llegamos a la Estación Biológica Wayqecha.
Bajamos con nuestras cosas y nos instalaron en una cabañita, cerca al área donde se acampa. Acá, en el bosque montano nublado, las nubes se mueven como si tuvieran vida; aparecen de la nada y tapan toda la vista como quieren, hasta que el sol se abre paso entre ellas.
Bueno. Hoy que llegamos nos dedicamos a descansar. Toooda la tarde. Para mañana empezar con todas las fuerzas. Porque nos espera un trabajo duro y difícil. Pero muy bonito :).
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